Era un poeta
que anclaba la luna
en tierra firme.
que anclaba la luna
en tierra firme.
Sed de ti que me acosa en las noches hambrientas.
Trémula mano roja que hasta tu vida se alza.
Ebria sed, loca sed, sed de selva en sequía.
Sed de metal ardiendo, sed de raíces ávidas.
Hacia dónde, en las tardes que no vayan tus ojos
En viaje hacia mis ojos, esperándote entonces.
Pablo Neruda
2 comentarios:
Dina, tu poesía atrapa, eres femenina y profunda en tus versos. Este poema me parece sugerente y representa lo que somos....felicitaciones.
Gracias por enviarme la dirección de tu blogs.
Oriana.
Agradecería pusieras un enlace a mi blogs, yo pondré uno al tuyo.
Estimada Oriana ,con mucho gusto pondré en mi blog un enlace con el tuyo.Gracias por tus palabras.Un abrazo.
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